Por: El Socialista
Como parte de la UIT-CI, Izquierda Socialista convocó el sábado pasado a un acto internacionalista en homenaje al histórico triunfo revolucionario de octubre de 1917, y por el cierre del VI Congreso de la organización internacional.
En un clima de lucha no exento de emoción, militantes y dirigentes de Izquierda Socialista, junto con representantes de sus partidos hermanos de la Unidad Internacional de los Trabajadores-Cuarta Internacional (UIT-CI), delegaciones sindicales y amigos del partido, nos convocamos este último sábado en el auditorio de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA para conmemorar el centenario de la Revolución Rusa, reivindicando la vigencia del legado teórico y político de Lenin y Trotsky, y del fundador de nuestra corriente, Nahuel Moreno. Asimismo, el acto constituyó el cierre del VI Congreso de la UIT-CI en el cual dirigentes de las distintas secciones debatieron sobre la situación política mundial y definieron la política revolucionaria de los próximos tres años.
Se encontraban presentes en el acto las siguientes delegaciones: Corriente Socialista de los Trabajadores (CST-Psol) de Brasil; Partido Socialismo y Libertad (PSL) de Venezuela; ARPT y Fuersa de Bolivia, en proceso de unificación; Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) de Chile; Uníos de Perú; Propuesta Socialista (PS) de Panamá; Movimiento Al Socialismo (MAS, ex POS) de México; Lucha Internacionalista (LI) del Estado español; Grupo Socialista Internacionalista (GSI) de Francia; Partido de la Democracia Obrera (IDP) de Turquía, así como compañeros de las organizaciones simpatizantes Lucha Socialista (LS) de Brasil y KRD de Alemania, y compañeros de Noruega. Sus representantes subieron al escenario en medio de un caluroso recibimiento junto con los diputados de Izquierda Socialista Juan Carlos Giordano y Laura Marrone, y el compañero Miguel Sorans, dirigente de Izquierda Socialista y del Secretariado Internacional de la UIT-CI. También se hicieron presentes importantes dirigentes de Izquierda Socialista que encabezan las listas a legisladores y diputados del FIT, entre ellos la diputada bonaerense Mónica Schlotthauer, Rubén «Pollo» Sobrero, Angélica Lagunas -acompañada por una importante delegación de docentes neuquinos- y por Elizabeth Hernández (mamá de Brian, un caso emblemático de «gatillo fácil» en Neuquén) y Jorge Adaro. La compañera Liliana Olivero, candidata a diputada nacional, hizo llegar su saludo desde Córdoba. En el acto hubo, asimismo, trabajadores de PepsiCo y Argensun, en lucha contra los despidos. Habló un delegado de PepsiCo y se realizaron importantes colectas para los fondos de lucha. Asistieron además Andrea D’Atri, dirigente de PTS; Oscar Schaller, querellante contra el genocida Milani en la Megacausa de La Rioja; y Juan Carlos Coral, excandidato a presidente en 1973 del «glorioso PST».
Después de los discursos de varios dirigentes internacionales, cerró el emotivo acto el Gringo Giordano, y todos los presentes entonamos La Internacional.
Presentamos extractos de los discursos pronunciados en el acto.
Josep Lluís del Alcázar, Lucha Internacionalista, Estado Español
Hablar de la Revolución Rusa es hablar de socialismo, de unidad obrera y de internacionalismo. Y todas estas banderas, cien años después, son tanto o más necesarias que nunca. El internacionalismo está más vivo que nunca.
Para los revolucionarios rusos el internacionalismo era cuestión no solo de solidaridad sino de absoluta supervivencia para la revolución. Esa era su comprensión sobre el carácter internacional de la lucha por la construcción del socialismo. Lamentablemente la revolución alemana fue derrotada y una ola de reacción también golpeó la Rusia revolucionaria y creó un auténtico cáncer, el estalinismo. Como no podía ser de otra manera (el estalinismo) tuvo no sólo que destruir físicamente la vanguardia revolucionaria, sino subordinar y finalmente terminar disolviendo la III Internacional. Una de las tareas más importantes de Trotsky antes de ser asesinado por el estalinismo fue reagrupar las fuerzas revolucionarias del marxismo en la IV Internacional.
Han pasado cien años de la Revolución Rusa y la necesidad del internacionalismo está más reforzada que nunca. No sólo para cualquier proceso revolucionario después de los desastres de intentos de socialismo en un solo país, sino porque el potente desarrollo de los medios de comunicación de estas décadas y la fuerte centralización e internacionalización del capital hacen que la conciencia de los trabajadores esté mucho más internacionalizada.
Lo vimos en las revoluciones árabes, cómo se extendían e iban saltando fronteras como un reguero de pólvora. En Barcelona, la ocupación de la plaza Catalunya por el movimiento de los indignados del 15 M era presidida por un cartel, «Plaza Tahir», la plaza en Egipto clave en la caída del dictador Mubarak. Lo hemos visto en el movimiento de mujeres y la extensión internacional que ha tomado este 8 de marzo. Hablaban los trabajadores de PepsiCo de la importancia de la solidaridad internacional de otras factorías de la multinacional. Hace pocos días los estibadores en huelga de los puertos del Estado español recibían la solidaridad de otros estibadores al negarse a descargar mercantes en otros puertos.
Reconstruir esta tradición del movimiento también forma parte de la necesidad de las luchas cotidianas, de reafirmar la lucha por el socialismo con los ejes de la Revolución Rusa para avanzar en la lucha por la reconstrucción de la IV Internacional.
Esta es la tarea y a ella queremos contribuir, desde la Unidad Internacional de Trabajadores, un pequeño pero decidido núcleo de compañeros comprometidos por la lucha de los trabajadores y los pueblos.
Miguel Ángel Hernández Arvelo, Secretario general del Partido Socialismo y Libertad de Venezuela
Vengo de un país donde el debate sobre lo que significa la revolución bolchevique sigue abierto porque desde hace dos décadas el chavismo le ha hecho creer a miles de jóvenes y activistas populares y sindicales que vamos al socialismo. Esto ha sido un engaño, una mentira. El «socialismo del siglo XXI» del chavismo es una estafa. Hoy el pueblo trabajador venezolano se hunde en medio del hambre, del desempleo. Es la peor situación de su historia contemporánea. Los trabajadores ganan salarios de hambre, los contratos colectivos han sido destruidos. El gobierno no es capaz de garantizar lo más elemental. No hay pan ni medicinas, ni siquiera se consigue la harina para hacer las arepas, el pan tradicional del pueblo venezolano. Miles deambulan por las calles de las ciudades hurgando por comida entre la basura. Hambre es el significado del chavismo y del falso «socialismo del siglo XXI» que distorsionó las ideas del socialismo, de la revolución bolchevique, de la lucha histórica de los trabajadores. Es el gran debate que tenemos planteado con activistas críticos del chavismo, descontentos, que están rompiendo en las calles con el gobierno ante la realidad del hambre. Un gobierno que hambrea y que ahora reprime. Porque ante esta situación el pueblo venezolano ha desatado una poderosa rebelión popular que se extiende a todos los rincones del país. Nuestro partido, el PSL, está acompañando a fondo este extraordinario proceso de movilizaciones con la consigna ¡fuera Maduro! También es cierto que la MUD intenta capitalizar el descontento para postularse como alternativa pero la rebelión popular la excede, no logran controlarla. Cada día se suman más jóvenes, más activistas, más gente a esta gran protesta y se organizan de manera autónoma. Nuestro partido siempre tuvo en claro que tarde o temprano el pueblo venezolano iba a irrumpir en las calles contra un gobierno que se disfrazó de socialista y antiimperialista, cuando entrega 500.000 dólares para el acto de asunción de Trump, vende la deuda a Goldman Sachs mientras la Citgo paga los actos del Día de la Independencia en Houston.
Frente a esta mentira nosotros creemos que solamente con un gran partido revolucionario que dirija a los trabajadores hacia la toma del poder, estableceremos un gobierno de los trabajadores y del pueblo que comience a construir el verdadero socialismo con democracia obrera para satisfacer las necesidades del pueblo venezolano. Y que siga luchando por la revolución socialista mundial, que es la perspectiva que todos nosotros tenemos.
Juan Carlos Giordano, Diputado nacional de Izquierda Socialista en el FIT
Estamos muy orgullosos desde Izquierda Socialista de estar haciendo este acto homenaje, junto a dirigentes de partidos hermanos de Latinoamérica, Europa y Turquía, a 100 años de la gloriosa Revolución Rusa que conmovió al mundo.
Por primera vez en la historia millones de obreros y campesinos conquistaban el primer gobierno obrero y socialista del mundo. Se comenzó reclamando Paz, Pan y Tierra, pero para lograrlo sus máximos dirigentes Lenin y Trotsky plantearon con claridad que había que tomar el poder, por eso dijeron ¡todo el poder a los soviets!
Con la expropiación de los capitalistas y una economía planificada se empezaron a combatir los grandes males capitalistas y se vivió una democracia plena jamás vista para las masas empobrecidas. Aunque esa revolución no se extendió por la traición del estalinismo, por la nefasta teoría del socialismo en un solo país y la coexistencia pacífica con el imperialismo, esa experiencia mostró que había una alternativa a la barbarie capitalista. Hacemos este acto para ratificar que sus enseñanzas siguen vigentes. Por eso vamos a seguir luchando por una Argentina y un mundo socialistas. ¡Ese es nuestro primer compromiso!
El sistema capitalista imperialista es sinónimo de explotación, hambre y miseria para los pueblos del mundo y ganancias siderales para una minoría parasitaria de banqueros, multinacionales y grandes empresarios. El capitalismo es saqueo y devastación del planeta. Por eso somos parte de las luchas, como la de ahora contra el G20 en Alemania; la de los trabajadores, las mujeres y la juventud contra el gobierno imperialista de Donald Trump; fuimos parte del paro mundial de mujeres del 8M y el NiUnaMenos; estamos orgullosos de haber hecho una campaña mundial en apoyo al pueblo rebelde de Siria contra el dictador Bashar al Assad y por la primavera árabe; apoyamos al heroico pueblo palestino contra el Estado terrorista de Israel; apoyamos a los trabajadores de Grecia contra el gobierno de falsa izquierda de Syriza; somos parte de las puebladas en Venezuela contra el hambre y la represión de Maduro; estamos por Fuera Temer en Brasil y que gobiernen los trabajadores; apoyamos a los trabajadores de Pepsico y a los docentes de Santa Cruz. Y seguiremos en primera fila combatiendo los planes de ajuste capitalistas que aplican todos los gobiernos, sean del color que sean.
Llamamos a la más amplia unidad para derrotar el ajuste de Macri, con sus despidos, robo salarial, saqueo y más deuda externa. Izquierda Socialista junto a los compañeros del FIT levantamos un programa alternativo, socialista, para que gobiernen los trabajadores y se deje de pagar la deuda externa.
Vamos a la campaña electoral proponiendo las mismas medidas anticapitalistas y socialistas que tomaron los bolcheviques en 1917. Por eso cuando nos preguntan cuál es nuestro modelo de país, contestamos que nuestro modelo es el socialismo con plena democracia obrera para los trabajadores y demás sectores populares.
Para dar esta pelea hace falta construir una herramienta política, construir fuertes partidos revolucionarios, una tarea que quedó inconclusa cuando la burocracia estalinista desplazó a Trotsky y a los bolcheviques de la conducción de la URSS y la Tercera Internacional. Una tarea difícil, pero clave, y la más apasionante.
A 100 años de la Revolución Rusa; a 50 años del asesinato del Che y a 30 años de la muerte de nuestro maestro Nahuel Moreno, quien dedicó su vida a la construcción del partido y la internacional, juramos seguir construyendo el partido mundial de la revolución socialista. Llamamos a seguir dando pasos por la reconstrucción de la IV Internacional. Lo vamos a seguir haciendo con la memoria de nuestros caídos, que dieron la vida por un mundo sin explotados ni oprimidos.
Mathieu, Grupo Socialista Internacionalista, Francia
Desde el GSI de Francia, quiero saludar y manifestar todo mi apoyo a los trabajadores y jóvenes de Argentina en lucha contra el ajuste del gobierno.
También en Francia el gobierno recién electo dice que hay que reducir la deuda pública y hacer recortes en salud, educación, jubilaciones y servicios públicos, bajar los salarios y aumentar la precariedad laboral.
Para aplicar estos planes, el gobierno reprimió al movimiento obrero apoyándose en el estado de emergencia con el pretexto de combatir el terrorismo. No obstante, los trabajadores y los jóvenes se movilizaron el año pasado durante más de cinco meses contra la ley laboral, que fue aprobada por una maniobra antidemocrática en el parlamento y porque las direcciones sindicales se negaron a construir la huelga general. Desde entonces, se observa una verdadera ola de luchas.
El combate que tenemos contra los ajustes en Argentina y en Francia es parte del mismo combate. A 100 años de la Revolución Rusa, hoy más que nunca necesitamos de partidos para la revolución socialista contra la barbarie capitalista.
Gorkem Düru, Partido de la Democracia Obrera (IDP), Turquía
La Revolución Rusa abrió una nueva era para la humanidad, la era de la revolución socialista mundial, y conmemorar ese evento histórico es subrayar una actualidad, una necesidad y un deber.
La actualidad es que la crisis más larga del capitalismo ha demostrado que es un sistema totalmente descompuesto y que arrastra a la humanidad hacia una destrucción total.
La necesidad es la expropiación del capitalismo, la creación de un mundo sin explotación y sin clases, y llevar a cabo la revolución socialista mundial.
Desde la crisis mundial de 2008, en varios lugares del mundo las masas han empezado entrar una vez más en escena para luchar contra el orden capitalista. Muchas han sido frenadas por las políticas de direcciones reformistas y contrarrevolucionarias.
Nosotros no creemos que el capitalismo se pueda reformar, ni que sea posible salvarlo. Esa necesidad nos obliga a cumplir un deber urgente, que es la construcción de una dirección revolucionaria mundial. Los 100 años de la Revolución Rusa son la antorcha que ilumina el camino que debemos de seguir.
Rosi Messias, Dirigente de CST y secretaria general del PSOL en Río de Janeiro, Brasil
Un siglo después de la Revolución Rusa, las enseñanzas de Lenin y Trotsky siguen más actuales que nunca al ver la situación de crisis y miseria absoluta que viven los trabajadores y los pueblos del mundo.
En Brasil no es diferente. Pero el hecho nuevo es que la clase trabajadora entró en escena. La huelga general el 28 de abril en la que pararon más de 40 millones de trabajadores es un hecho histórico. El ascenso que vivimos hoy en Brasil es superior a los vividos en años anteriores porque son los trabajadores los protagonistas, con sus métodos, luchas, manifestaciones, huelgas y con la huelga general, y porque tiene como centro el derrocamiento del gobierno ilegítimo de Temer y sus reformas neoliberales. Por eso es urgente construir un polo político y sindical con una política que tenga como eje la movilización como única salida.
Sabemos que nuestras tareas son enormes. Pero es la única forma de luchar por un gobierno de los trabajadores, sin patrones y sin burócratas, sin la falsa izquierda de Maduro y de Lula.