Por Unidad Internacional de Trabajadoras y Trabajadores – Cuarta Internacional
14/03/2024. El pasado 8 de marzo 2024, durante la masiva movilización por Día Internacional de la Mujer en distintas ciudades y estados de México, las fuerzas policiales del gobierno nacional y regional, reprimieron, detuvieron, criminalizaron y amedrentaron a cientos de jóvenes que salieron a las calles a manifestarse ante el creciente número de feminicidios, de la violencia machista, la impunidad institucional, y la agudización de la precarización y desigualdad que padecen las mujeres trabajadoras, empobrecidas y desposeídas.
Desde la Unidad Internacional de Trabajadoras y Trabajadores – Cuarta Internacional, rechazamos categóricamente la represión y el abuso policial, ocurrida en ciudades como Colima, Edomex, Zacatecas y Puebla, Nueva León donde, además del abuso de autoridad, detenciones arbitrarias, se utilizaron gases lacrimógenos en contra de las manifestantes, sin importarles la presencia y afectación a infancias y personas mayores.
Los gobiernos son los responsables de las distintas formas de violencia que vivimos las mujeres y disidencias, por ello cada 8 de marzo salimos a las calles a ejercer nuestro derecho a manifestarnos en contra de Los planes de ajuste que los gobiernos aplican a la clase trabajadora frente a la actual crisis capitalista que perjudica especialmente a las mujeres y disidencias de los sectores populares. Es así como ante las justas exigencias el gobierno de López Obrador cada 8 de marzo, trata de impedir las movilizaciones colocando vallas en Palacio Nacional como señal de amedrentamiento al movimiento de mujeres, demostrando que no tiene el menor interés en escuchar y resolver las problemáticas que padecemos la mayoría de las mujeres.
Este 2024, el gobierno de AMLO fue un poco más lejos en su política de provocación e impunidad y borró nombres del registro de personas desaparecidas, cuyos familiares han protagonizado esta marcha para exigir justicia y que no olviden a su desaparecida, pero este gobierno les ha desaparecido por segunda vez. Cómo si fuera poco, fue público y notorio el patrón de actuación en varias ciudades cuando hombres infiltrados en las manifestaciones agredieron verbal y físicamente quienes protestaban sin que los cuerpos policiales previnieran, disuadieran o evitaran esos ataques, ante esta agresión las jóvenes respondieron en su defensa para luego inundar las redes con versiones distorsionadas, fomentando discursos de odio contra las mujeres y descalificando la organización, movilización y justas reivindicaciones. Por eso, no confiamos en los cuerpos policíacos, ellos no nos protegen, es nuestra organización la que nos permitirá detener las provocaciones.
Desde la Unidad Internacional de Trabajadoras y Trabajadores – Cuarta Internacional expresamos solidaridad incondicional y repudio a los ataques sufridos, hacemos responsable de la integridad de las jóvenes detenidas al gobierno de AMLO y a los gobiernos estatales y municipales, nos unimos a la exigencia del movimiento feminista mexicano para que se castigue a los responsables de los abusos policiales.
La movilización y organización permanente, unitaria, independiente y en las calles, será la que nos permitirá defender nuestros derechos, combatir la barbarie a la que nos quiere condenar este sistema capitalista y patriarcal.
¡Alto a la criminalización y represión de la protesta feminista!
¡Si tocan a una, respondemos todas!