Por Miguel Lamas, dirigente de la UIT-CI
7/45/2025. Los sindicatos palestinos convocan a una Jornada Mundial de Acción el 15 de mayo, fecha aniversario 77º de la Nakba: llaman a “intensificar la presión a favor de sanciones inmediatas, legales y específicas contra Israel, incluido un embargo militar total”.
Nakba significa “catástrofe” en árabe, y el “día de la Nakba” fue designado por los palestinos el 15 de mayo de 1948 porque fue el día siguiente de la fundación del Estado de Israel que expulsó a los palestinos de sus casas y tierras de origen.
Colonización imperialista y sionista
El imperialismo norteamericano y británico fueron determinantes en esta fundación de Israel, como un instrumento para dominar el Medio Oriente y adueñarse de sus riquezas, en especial los hidrocarburos.
Israel se fundó expulsando palestinos y sus tierras fueron entregadas a judíos migrantes provenientes de Europa, Rusia, Ucrania, Polonia, Alemania, también de Argentina y otros países del mundo. El argumento sionista fue que esa era la “tierra prometida”, la tierra de sus supuestos ancestros judíos de hace 2 mil años. Algo absurdamente falso. Casi ninguno de los migrantes judíos que ocuparon Palestina tiene reales ancestros en la región. Sólo vivía una minoría judía semita, que convivió siglos pacíficamente con otros semitas árabes de diferentes religiones, también cristianos. Fue recién desde el siglo VII que surgió el Islam como la religión mayoritaria.
Esa Nakba de 1948 siguió empeorando en los siguientes años. La mayor parte de los palestinos fueron expulsados de sus casas y territorios y decenas de miles asesinados.
Israel también atacó en distintos momentos estados árabes vecinos, como Líbano, Egipto y Jordania.
Muchos de los palestinos y palestinas tuvieron que refugiarse en otros países. Una cantidad importante fue a Cisjordania y Gaza, que suman el 22% del territorio de la Palestina histórica y hoy tienen cinco millones de palestinos que ahí resisten.
Hace treinta años se acordó entre Israel y la Organización de Liberación Palestina (OLP) crear ahí un Estado Palestino. Pero eso jamás ocurrió. Israel no lo permitió. De modo que invadió Cisjordania y ahora Gaza.
Detener el genocidio
En los últimos 19 meses, desde la nueva invasión de Israel en Gaza, fueron asesinados más de 61.700 palestinos y palestinas, el 70% mujeres y niños. La heroica resistencia impidió hasta ahora que Israel pueda dominar completamente la Franja y expulsar a los 2 millones de palestinos como anunciaron y con el apoyo abierto de Donald Trump.
También siguen las movilizaciones de solidaridad con Palestina de los pueblos del mundo. El 2 de mayo marcharon más de un millón de personas en Yemen, que tiene el único gobierno árabe solidario con Palestina, y que fue bombardeado varias veces por Estados Unidos. El 12 de abril también marcharon un millón de personas en Bangladesh. Y hubo grandes marchas recientes en Marruecos, Líbano, Francia, Canadá, Estados Unidos, Reino Unido, Siria, entre otros países.
Desde Palestina, Gaza y Cisjordania, los sindicatos llaman a intensificar esa solidaridad, con manifestaciones el día de la Nakba el 15 de mayo, y exigir sanciones a Israel y anular toda entrega de armas que se hace hoy desde Estados Unidos y Europa. Organizaciones solidarias con Palestina de distintos países, plantearon apoyar estas manifestaciones el día de la Nakba y en esa semana.
Desde la Unidad Internacional de Trabajadoras y Trabajadores – Cuarta Internacional (UIT-CI), apoyamos a este llamado a la movilización mundial en defensa del heroico pueblo palestino, contra toda entrega de armas a Israel, contra el genocidio y el intento del criminal Netanyahu con apoyo del ultraderechista Donald Trump de anexarse Gaza, matando y expulsando palestinos.
Los gobiernos y monarquías árabes y de Medio Oriente, salvo el régimen de los hutíes en Yemen, no hacen nada en respaldo a la lucha del pueblo palestino, se limitan a emitir tibias declaraciones, cuando deberían romper toda relación con Israel y apoyar con armas y recursos a las organizaciones de resistencia.
Exigimos un inmediato alto al fuego, el retiro de todas las tropas israelíes y el respeto a la integridad de Gaza como parte de Palestina; así como también la inmediata liberación de todos los pasos fronterizos para garantizar el ingreso de alimentos, medicamentos, combustibles y agua, y el restablecimiento inmediato de la energía eléctrica. Repudiamos los bombardeos de Estados Unidos contra Yemen, exigimos el retiro inmediato de las fuerzas israelíes del sur de Siria y Líbano. Rechazamos la ilegal detención y amenaza de deportaciones de activistas que defienden la libertad de Palestina, como ha sucedido en los Estados Unidos y Alemania. Ruptura de relaciones políticas, diplomáticas, comerciales, culturales y académicas con Israel. Por una Palestina única, laica, democrática y no racista. ¡Palestina libre del río al mar!