Por Adolfo Santos, dirigente de Izquierda Socialista/FIT Unidad
22/9/2025. Este lunes 22, gran parte de Italia se plegó a una huelga general para repudiar el genocidio en Gaza, apoyar a la Flotilla Global Sumud y exigir al gobierno de Giorgia Meloni que rompa relaciones con Israel y reconozca al Estado Palestino. Este gesto de solidaridad con Gaza consolida una movilización mundial que crece de manera ininterrumpida, hoy habrá decenas de ciudades con manifestaciones alrededor del planeta.
La lucha ha conseguido que en estos días cuatro nuevos países han reconocido al Estado Palestino, Reino Unido, Canadá, Australia y Portugal. Una de esas expresiones es la flotilla que navega rumbo a Gaza para intentar abrir un corredor humanitario que alivie la hambruna generada por los ataques del Estado terrorista de Israel.
El paro, convocado por la Unión de Sindicatos de Base (USB), fue acatado por miles de personas en gran parte de Italia y recibió un fuerte apoyo de colectivos estudiantiles de diferentes niveles y de docentes que suspendieron las clases para sumarse masivamente a las movilizaciones. La huelga afectó a puertos, transporte terrestre, educación, sanidad, logística y bomberos. Esta acción le dio continuidad a otro paro de cuatro horas, también en defensa de Gaza, organizado el viernes 19 por la Confederazione Generale Italiana del Lavoro (CGIL), uno de los sindicatos más importantes del país. Según la USB, “los principales puertos de Italia, el 90% del transporte público y el 50% de los ferrocarriles quedaron bloqueados”.
En la estación central de Milán se produjeron enfrentamientos con la policía cuando grupos de manifestantes intentaron acceder al interior de la terminal para interrumpir la circulación de trenes. En Roma, se concentraron 100 mil personas que bloquearon los accesos a la estación Termini, la principal de ferrocarril de Roma y de Italia, lo que originó un gran caos con una multitud de viajeros y turistas que pretendían acceder a ese transporte. Algo similar sucedió en la estación Porta Nuova de Turín. En Bolonia, se manifestaron 50 mil personas y se interrumpió el tránsito en la autopista A-1. En Nápoles, se calculan 40 mil manifestantes, mientras que en la región de Toscana grupos de personas cortaron la autopista Florencia-Pisa-Livorno.
El bloqueo en los puertos tuvo un gran impacto. La Unión de Sindicatos de Base, que participa en la organización de la flotilla rumbo a Gaza, cumplió su promesa de paralizar estas terminales en defensa de Gaza y de la Flotilla Global Sumud. El puerto de Génova quedó bloqueado, lugar desde donde partieron las embarcaciones italianas que se unieron a las salidas desde Barcelona, con 200 toneladas de víveres donadas por ciudadanos. También se bloqueó el puerto de Marghera, en Venecia. Las protestas se extendieron a Livorno, Trieste, Ancona y Civitavecchia (cerca de Roma y principal puerto de cruceros y ferris del centro del país). En Ravenna, los trabajadores portuarios detuvieron días atrás dos contenedores que se dirigían a Israel.
La solidaridad con Gaza, con el pueblo palestino y con la flotilla humanitaria que intenta romper el bloqueo sionista se extiende con fuerza creciente. Frenar los crímenes del sionismo, apoyado por el imperialismo mundial, y exigir la ruptura de relaciones comerciales, diplomáticas y militares con el Estado de Israel es una tarea urgente para las masas del mundo. Si las potencias pensaron que al transmitir un genocidio televisado lograrían intimidar a los pueblos, están provocando el efecto contrario: la mayor muestra de solidaridad mundial de la historia. Las movilizaciones, las huelgas y la Flotilla Global Sumud (de la que somos parte con el Diputado Nacional Juan Carlos Giordano y Ezequiel Peressini, dirigente de la UIT-CI) con ayuda humanitaria, entre otras acciones, multiplican las voces que exigen: basta de genocidio. Por una Palestina única, libre, democrática y no racista, del río al mar.