En los días 24, 25, 26 y 27 de junio se llevó a cabo el IV Congreso de la UIT-CI (Unidad Internacional de los Trabajadores-Cuarta Internacional), en San José Dos Campos, San Pablo, Brasil. Con delegados de sus distintas secciones e invitados de otras corrientes políticas, se dio un rico debate y se tomaron importantes resoluciones y campañas al servicio de apoyar las luchas del mundo y seguir uniendo a los revolucionarios.
El Congreso sesionó en las instalaciones del Sindicato de la Alimentación. Nuestra organización hermana la CST (Corriente Socialista de los Trabajadores en el PSOL), ofició de anfitrión. Previamente se hicieron conferencias y eventos de los partidos y grupos que se debatieron las Tesis Mundiales y el Balance y la Orientación para los próximos años. También se debatió la situación nacional de Venezuela, Brasil, Bolivia, Cuba y Bolivia, entre otros.
Estuvieron presentes entre los delegados e invitados los compañeros Orlando Chirino y José Bodas de Venezuela; Carlos Barrera (ex dirigente de la Fejuve de El Alto), de La Protesta y Eliseo Mamani, Secretario Ejecutivo de la Federación de Maestros Rurales de La Paz, de Bolivia; de Brasil, Babá de la CST y varios dirigentes sindicales, entre ellos Pedro Rosa, Neide Solimoes y Wellington Cabral. El MST de Chile, se reintegró como sección nacional. Estuvo una delegación del KRD de Alemania, como organización simpatizante. Participaron como invitados Joseph Lluís de Alcázar (Lucha Internacionalista, del Estado Español) y Atakan Ciftci (Frente Obrero, de Turquía) del Comité de Enlace Internacional (CEI) y Enrique Gómez, del POS de México.
Crisis capitalista y las luchas obreras y populares
Hubo plena coincidencia que estamos transitando la mayor crisis capitalista mundial, que el imperialismo padece una crisis de dominación económica, política y militar, y que las luchas de los trabajadores, jóvenes, desocupados, campesinos y demás sectores populares recorren todos los continentes. Ascenso que tiene su epicentro en Europa y en el norte de Africa con la denominada revolución árabe. En Latinoamérica también se manifiestan las consecuencias de la crisis mundial y la lucha de los pueblos.
En Túnez, Egipto y Libia han caído feroces dictadores proimperialistas. Y en Siria el pueblo resiste y enfrenta a la feroz dictadura de Al Assad. En Europa se suceden movilizaciones y huelgas generales (9 en Francia, 18 en Grecia, entre otras), y en las elecciones prima el «voto castigo» contra los gobiernos de turno, dándose en algunos casos un giro a izquierda electoral, como se demostró en Grecia. Apreciándose una pulseada internacional para que la crisis la paguen quienes la provocaron (las multinacionales, banqueros y capitalistas), no los trabajadores.
En Latinoamérica se constató que los gobiernos que surgieron hace algunos años mostrándose como «progresistas» (Lula-Dilma, Cristina Kirchner) o «de izquierda» (Chávez, Evo Morales, Correa, Humala, Mujica), más allá de sus discursos, descargan la crisis mundial contra sus pueblos, aplican planes económicos en beneficio de las multinacionales y criminalizan la protesta social. Obligando a los trabajadores y demás sectores populares a enfrentarlos decididamente. Luchas que encuentran al frente a una enorme vanguardia radicalizada, base para empalmar y seguir dando pasos en la construcción de una nueva dirección sindical y política de los trabajadores.
Unidad de los que luchan y de los revolucionarios
Ante esta situación, es clave seguir promoviendo la más amplia unidad de acción para enfrentar los planes de ajuste, unir a la oposición en los gremios contra la burocracia sindical y llamar a construir partidos y corrientes de izquierda y revolucionarias. Para ello son decisivas las iniciativas y campañas comunes.
Fue muy valorada la que estamos impulsando en apoyo al pueblo de Siria junto a los compañeros del CEI. Se consideró impulsar otra en apoyo a los pueblos que luchan contra la Unión Europea, en especial el de Grecia. Y se acordó por unanimidad, junto a las organizaciones y dirigentes invitados, dar el apoyo político y militante a la candidatura obrera y socialista de Orlando Chirino en las elecciones presidenciales de octubre en Venezuela, haciendo a tal fin una campaña de pronunciamientos y adhesiones.
A su vez, además de aprobar distintas resoluciones (ver columna), se constataron importantes coincidencias políticas con las organizaciones invitadas, acordándose no solo campañas comunes, sino la necesidad de seguir explorando procesos de acercamientos entre nuestras organizaciones en vistas a dar pasos unitarios en la perspectiva de la reconstrucción de la IV Internacional. Combatiendo tanto al oportunismo como al sectarismo. Mientras se siguen debatiendo las diferentes ópticas que se tienen ante la situación mundial, en un marco de lealtad revolucionaria, condición básica para ir sellando sólidos pasos unitarios.
La próxima conferencia de los compañeros del CEI en Estambul para octubre de este año, a la cual fue invitada la UIT-CI, será otro evento importante en ese camino. Así como las relaciones que hay que seguir profundizando con los compañeros del POS de México y otros dirigentes valiosos, con quienes venimos construyendo La Protesta en Bolivia, y quienes se puedan ir sumando en el próximo período.
Para la UIT-CI queda claro que hay que seguir levantando bien alto las banderas que nos legó Nahuel Moreno, es decir, de la revolución socialista, para liberar a la humanidad de los males del capitalismo-imperialista. Y empezar a construir el socialismo con plena democracia obrera, donde sean los trabajadores y demás sectores populares los que pasen a gobernar. Mensaje que fue recogido por Miguel Sorans cuando dio el saludo final al Congreso, adelantando el balance del mismo: «nos propusimos avanzar en la discusión sobre la situación mundial, en las tareas que tenemos por delante y en mayores acuerdos con otras organizaciones y lo logramos: tarea cumplida». Tras las palabras finales de las organizaciones invitadas, se cantó con entusiasmo las estrofas de la Internacional.