Hay sectores de izquierda, entre ellos compañeros que simpatizan con el chavismo aunque son críticos de Maduro, y también organizaciones que se reclaman trotskistas, que critican la política de nuestra corriente, la UIT-CI, para Venezuela. Entre ellos el Nuevo MAS, de Argentina y la LTS, grupo venezolano ligado al PTS de Argentina. Cuestionan que, junto al repudio a cualquier amenaza de invasión imperialista o intento de golpe, levantemos también la consigna ¡Fuera Maduro, por un gobierno de los trabajadores! Para ellos “la consigna de fuera Maduro, le hace el juego al imperialismo”. Discrepamos con estas posturas que le claudican al gobierno hambreador y represor de Maduro.
Escribe Miguel Sorans (Dirigente de Izquierda Socialista-FIT y de la UIT-CI)
Estas equivocadas críticas han sido desarrolladas por el Nuevo MAS en su publicación Socialismo o Barbarie N° 503 (14/2/2019) en una nota de Víctor Artavia, acusando a la UIT-CI de ponerse “a la sombra del golpismo”. Similar crítica ha lanzado la Liga de Trabajadores Socialista (LTS) en el texto “Con la política del PSL no se enfrenta al imperialismo ni a la derecha”, publicada en la Izquierda Diario, el 13/3/2019.
La política de Maduro y el chavismo le hacen el juego al imperialismo
Desde hace varios años, a medida que comenzó a recuperar fuerzas la casi desaparecida derecha “escuálida”, venimos denunciando que los responsables han sido el gobierno de Hugo Chávez primero y luego de su heredero Nicolás Maduro. Ellos han ido alimentando la confusión y el rechazo entre el pueblo trabajador, haciendo que resucite la derecha pro yanqui y favoreciendo políticamente a Trump y el imperialismo.
Es el doble discurso, el hablar de “lucha contra el imperio”, de que se está construyendo el socialismo, mientras el pueblo vive cada vez peor, por culpa de un gobierno cívico-militar antiobrero y cada vez más dictatorial. La realidad es que el chavismo ha venido gobernando durante ya casi 20 años asociado a las multinacionales del petróleo, pagando deuda externa, atacando el nivel de vida de los trabajadores y reprimiendo sus protestas. Esto es lo que ha ido acumulando el odio y el rechazo al gobierno por parte del pueblo, que lamentablemente lo han venido capitalizando Guaidó y Trump. Son estas políticas las que han favorecido y le han hecho el juego al imperialismo.
Desde una perspectiva de rechazo a cualquier intentona de golpe militar, y también de invasión imperialista, tenemos que decir claramente que hay un gobierno hambreador y que tiene que haber una movilización independiente de los trabajadores y el pueblo para sacar a Maduro. Este es el centro de la situación en Venezuela hoy.
Además, es muy importante aclarar una tergiversación de los compañeros del Nuevo MAS. Según la nota citada “la UIT llama a sumarse a las movilizaciones (convocadas por los golpistas)”. Falso. Ni la UIT-CI ni nuestra sección el Partido Socialismo y Libertad (PSL) convocan a sumarse a los actos y movilizaciones que convoca Guaidó. Es una calumnia que deberían retirar del debate.
La LTS/PTS se suma a las tergiversaciones
Lamentablemente los compañeros de la LTS y del PTS, al darle cabida en la Izquierda Diario de Argentina al texto de la LTS, se suman a las tergiversaciones contra el PSL de Venezuela para, objetivamente, sumarse a los sectores que le da un apoyo vergonzante a Maduro. Se pretende decir que el PSL estaría llamando a sumarse a las movilizaciones de Guaidó. Esto es una mentira. Y como no lo pueden demostrar, buscan confundir inventando supuestas citas del PSL por las cuales estaría convocando a “todos contra Maduro”, “todos podemos estar juntos”, “sin diferenciar el carácter de clase”.
Es totalmente falso que el PSL haya lanzado la consigna “Todos podemos estar juntos” contra Maduro y que no centre en llamar a los trabajadores a una movilización independiente de Guaidó y de Maduro. Y rematan con otra falsificación, acusando al PSL de no hacer una “denuncia furibunda a la avanzada golpista”. Desde el primer momento el PSL viene denunciando la injerencia imperialista e intento golpista y ha denunciado a Guaidó. Según la LTS/PTS “la vuelta de la derecha neoliberal y proimperialista al poder en este contexto, no parece mayor problema para el PSL”. Es lamentable que sectores revolucionarios utilicen este tipo de lenguaje calumniador. Por nuestra parte vamos a seguir desmintiendo las tergiversaciones y falsificaciones, pero nos vamos a centrar en dar una respuesta política y que ayude a los luchadores a tratar de desentrañar cual es una verdadera política revolucionaria que no le debe claudicar a la derecha y tampoco a los traidores del movimiento obrero como los Maduro y Cía.
Seguimos las enseñanzas
de Lenin
Este es un debate muy importante y necesario entre los revolucionarios y toda la izquierda. En la actual situación de Venezuela, en el marco del rechazo al intento golpista y la injerencia imperialista, decimos categóricamente que no plantear que hay que sacar a Maduro con la movilización obrera y popular independiente es hacerle el juego a Maduro y su gobierno cívico-militar odiado por el pueblo, es capitular al chavismo.
Ese es el archiconocido argumento de los chavistas para buscar sostenerse en el poder en forma dictatorial acusando de “pro yanqui” a todos los que desde la izquierda no los apoyan. El gran problema en Venezuela es que millones de trabajadores y jóvenes odian a Maduro y su ajuste y equivocadamente se vuelca a apoyar a Guaidó. Las posturas tipo Nuevo MAS y LTS/PTS, que le claudican a Maduro, se niegan a presentar una opción revolucionaria ante la derecha pro yanqui.
El PSL y la UIT-CI repudian el actual intento de golpe. Pero aún no se ha dado una situación comparable al golpe pro yanqui y el boicot petrolero de 2002-03 contra Chávez, cuando nuestros compañeros venezolanos estuvieron, con el apoyo de toda nuestra corriente, en la primera fila de la movilización obrera y popular para derrotarlos, cosa que se logró exitosamente. Si se diera, repetiremos aquella misma política que tuvimos en el 2002-03.
En ese sentido seguimos las enseñanzas de nuestros maestros Lenin y Trotsky. A los compañeros del Nuevo MAS y de la LTS/PTS, como a otros sectores que se reivindican antiimperialistas y de izquierda, que cuestionan nuestro repudio permanente al gobierno y al régimen de Maduro, por su falso discurso “socialista” y su represión, reivindicando un gobierno de los trabajadores, les queremos recordar la enseñanza dejada por Lenin en 1917, ante el golpe contrarrevolucionario del general Kornilov contra el gobierno burgués y de conciliación de clases que encabezaba el falso “socialista” Kerensky y era integrado por los mencheviques. Desde su llegada a Petrogrado en abril de 1917, Lenin logró que los bolcheviques adoptaran su política de no dar ningún tipo de apoyo al gobierno provisional burgués surgido de la revolución de febrero, e impulsaran la toma del poder por los soviets y un gobierno obrero y campesino sin la burguesía. En agosto-setiembre ante el golpe de Kornilov contra el gobierno provisional, Lenin fue categórico: ni durante sus preparativos ni cuando se efectivizó, los bolcheviques debían abandonar su oposición al gobierno de Kerensky.
A mediados de agosto ya había rumores por toda Rusia de un alzamiento contrarrevolucionario encabezado por Kornilov. Ante la duda de muchos dirigentes bolcheviques de alentar un bloque para “defender” a Kerensky, decía Lenin: “[…] los bolcheviques que hubieran accedido a entrar en un bloque con los defensistas […] para expresar en forma indirecta confianza en el gobierno provisional (al que se defiende, según se afirma, de los cosacos) serían, por supuesto, expulsados inmediatamente –y con pleno fundamento- del partido.” (“Rumores sobre una conspiración”, 18-19 de agosto de 1917). Lenin era más que categórico: expulsión de cualquier “forma indirecta” de apoyo al gobierno de Kerensky. O sea a un gobierno del doble discurso “socialista”.
En las notas citadas, el Nuevo MAS y la LTS/PTS acusan a la UIT-CI de levantar “la consigna de ‘fuera Maduro’, la misma que agitan Guaidó y Trump como parte del golpismo”. Pero también Lenin y Trotsky levantaban abajo Kerensky, la misma consigna que levantaban los golpistas de Kornilov y de la derecha contrarrevolucionaria rusa. Los socialistas revolucionarios lo hacemos desde una perspectiva totalmente opuesta, defendiendo los intereses de la clase obrera. Kornilov/Guaidó y Trump lo hacen al servicio de la contrarrevolución imperialista.
Cuando se concretó finalmente el intento de golpe en setiembre de 1917, tanto Lenin como Trotsky impulsaron la movilización para detenerlo y derrotarlo, pero incluso en esos días solo suspendieron la consigna de abajo Kerensky y todo el poder a los soviets, y la retomaron de inmediato al fracasar Kornilov.
En este sentido nuestra corriente es consecuente con las tradiciones y enseñanzas de nuestros maestros revolucionarios, de defender claramente una política de independencia de clase y de condena permanente a los gobiernos burgueses que, desde posturas de centro izquierda, pseudo revolucionarias o de falso “socialismo” atacan al movimiento obrero.
Si hay una invasión militar imperialista seguiremos los consejos de Trotsky
La LTS/PTS nos dice que nosotros iríamos contra el planteo de Trotsky quien, en una charla con el dirigente obrero trotskista argentino Mateo Fossa, refiriéndose a la lucha de las naciones oprimidas contra el imperialismo, dio un ejemplo hipotético sobre cómo responder ante un supuesto caso de que una Inglaterra “democrática” invadiera al Brasil gobernado por el semifascista Getulio Vargas. Decía: “Supongamos, empero, que el día de mañana entra en un conflicto militar con Brasil. ¿De qué lado se ubicará la clase obrera en ese conflicto? En este caso, yo personalmente estaría junto con el Brasil ‘fascista’ contra la ‘democrática’ Gran Bretaña. ¿Por qué? Porque no se trataría de un conflicto entre entre la democracia y el fascismo” (23/9/1938, Escritos, tomo X, vol. 1, Pluma, Bogotá, 1979)
Nosotros coincidimos y estamos de acuerdo con esa recomendación de León Trotsky. Pero no es el caso en estos momentos de Venezuela. No existe todavía una invasión militar, ni tampoco un golpe de la derecha. Hay intentos, pero no es la situación actual. Pública y reiteradamente venimos diciendo que, en caso de producirse esa invasión militar yanqui con el apoyo de otros países, como dijo Trotsky, circunstancialmente estaríamos en el campo militar –solo militar- de la dictadura represiva de Maduro. Sin darle ningún tipo de apoyo político. Lo mismo si se produjera un golpe militar pro yanqui, a lo que ya nos hemos referido anteriormente. En esto no tenemos ninguna duda ni ambigüedad. No existen todavía situaciones comparables a la invasión yanqui contra Saddam Hussein en el 2003. Ni es el caso tampoco de la guerra de Malvinas de 1982 contra Inglaterra, bajo la dictadura genocida de Galtieri. En ambos casos, los revolucionarios estuvimos del lado de la nación oprimida y contra el imperialismo.
La UIT-CI y el PSL mantienen una posición clara, principista y revolucionaria. Repudiamos cualquier intento de golpe y las amenazas de invasión militar por parte de la derecha de Guaidó y de Trump. Decimos que, contra Trump y contra Guaidó, llamamos al pueblo trabajador a que con su movilización saque a Maduro e imponga una salida obrera y popular a la crisis de Venezuela.