¡La operación militar contra Siria corre contra los intereses de los pueblos de la zona!
¡No a la operación militar transfronteriza de Turquía!
Partido de la Democracia Obrera (IDP)
1. El gobierno de Erdogan y el parlamento de Turquía hoy han resuelto enviar las Fuerzas Armadas al noroeste de Siria para una batalla larga. Los interlocutores de esos círculos comentan que el objetivo de esta operación no solamente es para construir “una zona de seguridad” sino que tiene la intención de liquidar totalmente las fuerzas de los PYD/YPG (Partido de Unidad Democrático/Unidades de Protección Popular), organizaciones kurdas sirias considerados por Turquía como filiales de PKK (Partido de los Trabajadores de Kurdistán).
Los mismos portavoces señalan que el propósito principal de la operación es resolver del problema de “supervivencia” de Turquía y no se limitará con una incursión de 35-40 kilómetros hacía dentro de Siria.
2. Antes del todo queremos indicar que para Turquía no hay ningún problema de supervivencia que le amenaza. El país no esta ante un peligro de invasión y además si fuera así los pueblos de Turquía son capaces de defender su país, sus entornos de vivencia. Una ofensiva contra los pueblos de otros países en nombre de proteger Turquía contra un supuesto peligro de división no contribuye a la independencia de Turquía sino justo al contrario fortalece su dependencia al imperialismo.
3. Esta operación arrastra Turquía hacia un pantano sin salida y le convierte en un peón que las poderes imperialistas y expansionistas en sus planes de dominación en la zona. Esos poderes están dando una pelea férrea entre ellas sobre Siria, sus pueblos y sus riquezas, y utilizan Turquía como un subcontratista. Todos estos países poderosos dicen que “comprenden bien la preocupación de seguridad de Turquía”, es decir le provocan para la operación militar, le abren el paso y definen los “limites” de la misma. Incluso por eso sacrifican las fuerzas locales con las que vienen colaborando. Turquía tiene que retirarse de este juego macabra sobre los pueblos sirios.
4. La razón real que arrastra Turquía en este juego no es un problema creado de nada, sino es el carácter racista, chauvinista y expansionista del régimen de Turquía, que intenta esconderse bajo de un discurso falso de “nacionalismo”. Para sobrevivir el régimen quiere crear un delirio chauvinista popular. La operación planificada nos es para defender el país contra los enemigos extranjeros sino lleva un carácter de invasión que va a provocar un conflicto fatal entre pueblos de la zona. La supervivencia de los pueblos de Turquía no pasa de una guerra con otros pueblos sino de la autodeterminación de todos los pueblos sobre sus futuros libremente y bajo de condiciones democráticas, y de la fraternidad que esto va a crear.
5. Esta operación decidida por el régimen bonapartista está apoyada y provocada fuertemente por la burguesía. Porque la burguesía ve grandes oportunidades de beneficio sobre todo en el sector de construcción en un Siria destruido y con la actual operación militar quedará aun más devastada. Por eso quieren aún más destrucción. Los planes del gobierno de Erdogan de construir pueblos en la zona de invasión contribuirán a los beneficios no solamente de las empresas grandes de construcción sino también de las que operan en los sectores como hierro/acero, cemento y hasta madera y electrodomésticos, que provoca el apetito de la oligarquía patronal unida detrás del régimen y el gobierno. Los patrones quieren fortalecer sus imperios empresariales que instalan sobre el fuego, sangre y muertes de los pueblos.
6. El coste de esta operación militar que se va a convertir en una invasión de larga duración será del nivel de millares de dólares. La economía de Turquía que ya está sufriendo de una crisis fuerte será aún más aplastada bajo de este coste. Pero si la operación le sale bien al régimen los que van a profitar de ella serán únicamente los productores y comerciantes de armas y los patrones amigos del gobierno. En cambio, la factura la pagará, a parte de las victimas de la guerra, los trabajadores y el pueblo que sufren del desempleo de alto nivel. Existe la posibilidad de que el gobierno anuncie nuevos impuestos para financiar la guerra.
7. La operación militar de Turquía podrá llegar a fomentar la liberación de fuerzas terroristas islamistas, la activación de sus células durmientes y la penetración de grupos yihadistas a Turquía para organizar atentados sangrientos sobre el pueblo. Así en Siria la guerra civil va a intensificarse una vez más y la ofensiva de los reaccionarios islamistas y del régimen contra las corrientes democráticas y revolucionarias va a endurecerse. También el pantano en que Turquía se mete será aún más profundo y va a crear una situación de movilización militar permanente con un estado de excepción que va a deteriorar aún más la vida democrática.
8. Por otra parte, el partido principal de la oposición, el Partido Popular Republicano, supuestamente socialdemócrata, ha apoyado en el parlamento la resolución de guerra con el argumento “del bien de nuestros soldados”, así una vez más apoyando el régimen bonapartista contra los intereses de la clase trabajadora y los pueblos de la zona. El PPR así asume la responsabilidad de las consecuencias de la operación militar del régimen turca.
9. Nosotros estamos contra este arrastre de los trabajadores y las masas populares a un pantano nefasto. Nuestra supervivencia e interés pasan por la colaboración y fraternidad con los pueblos del Oriente Medio. Y esto necesita la autodeterminación de los pueblos libre y democráticamente sus destinos, y la defensa de este derecho.
10. Turquía es dependiente en el imperialismo y la operación militar en Siria va a fortalecer esta dependencia. Mientras la tarea principal es romper verdaderamente este lazo de dependencia. Por eso, hay que salir de OTAN y cerrar todas las bases militares extranjeras en el país. Además, hay que llamar y asegurar la salida de los EE.UU. y de todas fuerzas imperialistas del Oriente Medio. Solamente tal política puede establecer la solidaridad y fraternidad de los pueblos de Turquía con otros pueblos de la zona, empezando por el pueblo kurdo.
11. La barrera principal ante la autodeterminación de los pueblos sirios es el campo contrarrevolucionario erigido con la colaboración del régimen dictatorial de Siria y de los países de la zona como Rusia, Irán, Turquía y Arabia Saudí y los poderes imperialistas con los EE.UU. en la cabeza. Estas fuerzas actúan no por los intereses de los pueblos sino conforme con los intereses del imperialismo. Para que el pueblo kurdo autodetermine su futuro no puede ser realizado con el apoyo de los EE.UU. sino con la lucha unitaria de los pueblos trabajadoras. Los problemas de Siria los puede y debe solucionar únicamente el pueblo sirio. Los trabajadores del mundo y sus organizaciones tienen que correr al apoyo de las fuerzas democráticas y revolucionarias.
Partido de la Democracia Obrera (IDP), sección turca de la UIT-CI
10 de octubre de 2019