Movimiento Socialista de los Trabajadores-Chile
Comparando con las pasadas elecciones municipales, en estas elecciones que han concluido, la Concertación redujo su votación en 177.871 sufragios. La Alianza fue más golpeada aún, con 615.103 votantes menos. Estos 792.974 votos (cifras provisorias) son el castigo del pueblo a las dos principales coaliciones en el poder, demostrando que el proceso de ruptura con el reaccionario régimen actual sigue su curso.
Para subrayar el punto, es importante detenerse en el fracaso de la maniobra de sumar mas votantes imponiendo la inscripción automática de todos los mayores de 18 años. Por la razón que sea, y de seguro son varias, la noticia más destacada del día fue que sólo una pequeñísima minoría de nuevos inscritos fueron a la cita que le impuso la Concertación y la Alianza, disparando la abstención a niveles históricos con el 59% del padrón electoral.
Piñera: El principal derrotado
Mientras todos ocultan el golpe recibido por el régimen, en esta parte del balance el acuerdo es prácticamente unánime. El principal derrotado es el gobierno. Los candidatos oficialistas lo sabían. Ninguno de ellos quiso aparecer en su publicidad abrazado a Piñera. La pérdida de municipios destacados en cada una de las regiones fue acompañada con la derrota de alcaldes históricos de la Alianza. La Concertación alcanzó más del 43% de los votos para alcaldes, contra el 37,57% del oficialismo. Con esta derrota la aspiración de seguir en la Moneda se debilita aún más y lo que es más importante debilita su plan de imponer sus reformas represivas con la ley Hinzpeter, las reformas medioambientales para que pasen los megaproyectos y la ley de pesca, que va en contra del pueblo, los trabajadores y la juventud movilizada.
La derrota del pinochetismo
No todos los pinchetistas fueron derrotados. La Alianza, perdió 23 alcaldes, pero sigue con 121. Sin embargo, cayeron los pinochetistas más recalcitrantes que tomaron con más energía la política represiva de Piñera.
Labbé, Zalaquet, Sabat y Garrido se hicieron conocidos por su acción represiva sobre los estudiantes movilizados o por reivindicar de forma más abierta y descarada el pinochetismo. En estas elecciones todos ellos junto a otros tantos de su calaña, fueron derrotados.
Aun cuando lamentablemente sólo fueron remplazados por personajes de la Concertación, su derrota también debe ser considerada como un triunfo importante del pueblo, pues debilitó objetivamente la política represiva del Gobierno de Piñera. Ahora la acción represiva de los nuevos alcaldes se vera seriamente afectada, pues asumirán frente a un movimiento estudiantil que aprovechara el espacio democrático conquistado para seguir luchando con más fuerza por educación gratuita.
El PC y su nefasta política
Desde la “rebelión popular” de los 80 al acuerdo total con la Concertación en estas elecciones municipales hay menos distancia de lo que aparenta. Pues es conocida la constante colaboración del PC con la Concertación para imponer la transición primero y dar sostén a los gobiernos de la Concertación luego. En la CUT el apoyo a la concertación ha sido permanente, lo mismo en el seno de las organizaciones estudiantiles. Sin embargo el PC había sido excluido hasta ahora de la Concertación. Los acuerdos electorales abiertos o encubiertos suplían esa falta de coherencia. Pero la falta de resultados electorales para ellos satisfactorios, los llevó a formar el Juntos Podemos que en las pasadas elecciones municipales conquistó siete alcaldías, seis de ellas PC y una PH, y más de medio millón de votos. Pero, ese camino, de alianza con la izquierda extraparlamentaria presentaba un problema insalvable. Debilitaba a la Concertación por la izquierda canalizando el descontento que no ha paraba de crecer.
La política de colaboración de clases del PC hizo incompatible al frente que crecía debilitando a la Concertación. El PC liquidó el Juntos Podemos para afianzar un acuerdo con la Concertación con un pacto que le reportó tres diputados en las pasadas elecciones parlamentarias y que lo llevó ahora a ser parte de la Concertación por un Chile Justo con el PPD y los Radicales. Ahora los candidatos comunistas, sin el menor tinte de oposición, se presentaron en estas elecciones sacando cuatro alcaldes, dos de ellos en la Región Metropolitana. El camino del PC está despejado para ingresar, a lo que todos ellos esperan sea, el futuro Gobierno de la Concertación con comunistas en los ministerios.
El Igualdad
El Partido Igualdad efectuó su debut de forma destacada. Tal vez no con el resultado que ellos esperaban, (de palabra, algunos de sus dirigentes, decían que se convertirían en la tercera fuerza electoral) pero de todos modos muy buenos. Igualdad es un frente de pequeños grupos de izquierda y de organizaciones populares que se han destacado en importantes luchas de su sector y que tienen el mérito de haber legalizado lo que ellos llaman un “instrumento político de los pueblos”. En Ñuñoa 6.327 votos, en la Pintana 4410 votos, en Valparaíso 4010 votos y en Alto Hospicio mas de 1099 votos lo que sumó el 10% de los votos de esa Comuna obrera de la Región de Iquique. Recordemos que en Ñuñoa la Justicia, presionada por la Concertación y la Alianza, impidió que se presentara en las elecciones unos de los dirigentes del Igualdad más destacados y Concejal de la Comuna, Lautaro Huanca.
Con mínimos, si no nulos recursos económicos, con muchos grupos en su interior que ni siquiera habían efectuado antes campaña electoral alguna, el Igualdad logró colocar un pie en el escenario político electoral, justo en el momento en que ese espacio lo cubren grupos y corrientes que o son populistas o derechamente apéndices de la Concertación como el PC.
Sin embargo, uno de las grandes debilidades de la campaña fue que Igualdad no pudo o no quiso unificar todas las campañas en torno a un eje o consigna común. En los pocos afiches y propaganda que se podía ver de sus candidatos sólo se dejaba constancia de que eran parte de Igualdad, pero no tenían (que nosotros sepamos) consigna política alguna que los diferenciara claramente de los demás candidatos y respondiera a las movilizaciones y demandas mas sentidas del pueblo y los trabajadores. Esto es fundamental, porque nuestras campañas electorales, las de la izquierda y los luchadores que aspiramos construir una nueva sociedad igualitaria y no capitalista (para nosotros, socialista) siempre hacemos uso de esta tribuna electoral para unificar las demandas del pueblo en contra del sistema impuesto por los grandes empresarios y capitalistas.
MST con Igualdad
Nuestra campaña en Puente Alto debió enfrentar varias dificultades adicionales a las que tuvo en común con todas las demás campañas del Igualdad. En la comuna se presentó la mayor abstención electoral del país, en especial de los jóvenes para los que fue dirigida principalmente la campaña. Además por fuera de la Alianza y la Concertación se presentaron dos alternativas de izquierda reformista que hicieron aún más difícil la captación de votos. Por ultimo, en Puente Alto la Alianza desplegó una de las campañas más millonarias del país.
A pesar de lo anterior, Rainier Ríos y Marcelo Molina lograron encabezar una gran campaña política en favor de la educación gratuita y en la necesidad de unificar las movilizaciones y elaborar un verdadero plan de lucha para conseguirla. Más de 80.000 volantes, 3000 afiches, miles de periódicos y decenas de rayados fueron parte de la campaña que sumó a docenas de vecinos y jóvenes. Mientras Rainier (Oso) logró 2543 votos, Marcelo conquistó 924.
Los desafíos para Igualdad
El Igualdad quedó con la tarea de seguir el próximo año batallando por impedir que se consume la maniobra reaccionaria del PC de fortalecer a la Concertación frente al quiebre electoral con la Alianza. Esta batalla electoral es parte de la otra batalla más importante. Seguir impulsando la movilización por educación gratuita y las demandas de los trabajadores y el pueblo que seguirán marcando este proceso de ruptura política con un régimen que pierde cada vez más apoyo entre el pueblo como demostró la caída de los votantes de la Alianza y la Concertación, la alta abstención, la derrota de los pinochetistas mas duros y la votación al Igualdad.
En Chile se está incubando una nueva revolución que tendrá como una de sus primeras tareas derribar la herencia económica y política pinochetista que defienden la Concertación y la Alianza y el reformismo reciclado tipo MEO. Las elecciones no son más que una simple batalla (nunca la decisiva) en el camino de conquistar un autentico gobierno obrero y popular que garantice la independencia del país de la rapiña del capital financiero y los grandes grupos económicos y la construcción de una sociedad socialista democrática e igualitaria.