El 11 de septiembre de 2018, Raja Eghbarieh fue arrestado desde su casa en Umm Al-Fahm, en Palestina de 1948. Su detención fue dos veces renovada y la fiscalía israelí anunció que lo imputarían el jueves 20 de septiembre.
Según las audiencias durante la prisión preventiva, todos los «delitos» del camarada Eghbarieh son sus mensajes en su página de Facebook, que según la acusación israelí contienen «incitación a la violencia». El camarada Eghbarieh explicó en el tribunal que todos sus mensajes son una expresión de una resistencia política legítima a la ocupación israelí y a los crímenes de guerra. La fiscalía declaró que solicitarán su detención por un período ilimitado hasta el final del juicio.
El camarada Eghbarieh es un miembro veterano del movimiento palestino de izquierda, Abnaa Al-Balad («Hijos de la tierra»). Fue el primer secretario general del movimiento y sigue siendo uno de sus principales líderes.
El arresto y la condena de Raja Eghbarieh es parte de un modalidad de agresión continua del estado sionista contra la libertad de expresión y la organización de los árabes palestinos, también aquellos que formalmente tienen la ciudadanía israelí. Mientras que los activistas son interrogados y arrestados regularmente, en los últimos años vemos un intento orquestado de erradicar el marco de las organizaciones políticas y los movimientos sociales árabes. Comenzó con el Movimiento Islámico, declarado fuera de la ley en noviembre de 2015. Muchos de sus miembros fueron arrestados y sentenciados a prisión por delitos tales como organizar oraciones en la mezquita Al-Aqsa. Esta modalidad continúa con el ataque a la Alianza Democrática Nacional (Balad), ya que muchos de sus activistas fueron interrogados y hay una demanda constante entre los partidos sionistas para evitar que participe en las elecciones de la Knesset (parlamento israelí).
El movimiento Abnaa Al-Balad, que representa una línea más de izquierda y radical , boicoteó las elecciones a la Knesset, siendo perseguido muchas veces, y sus líderes y activistas fueron víctimas de arrestos y detención administrativa. Ahora la detención del camarada Eghbarieh apuntaría al derecho de expresar posiciones nacionales palestinas en Internet.
La solidaridad internacional es urgente y es la forma más importante de defensa del escaso margen de actividad política para los palestinos en Palestina de 1948, que se suponía que disfrutarían de «la única democracia en el Medio Oriente». Los políticos israelíes y la opinión pública están abandonando cualquier apariencia de democracia, ya que todos los partidos sionistas compiten para promover el concepto colonialista de un estado «solo judío». La opinión pública árabe es vista con desprecio por las autoridades israelíes.
El hecho de que Israel puede realizar todos éstos crímenes, se debe al apoyo constante de las potencias occidentales, que le suministran armas, dinero, acceso preferencial a los mercados e impunidad legal. Todos estos privilegios se otorgan en base a la mentira de que Israel es una democracia.
Para las organizaciones de izquierda y los demócratas sinceros, hay una razón especial para defender y apoyar a Abnaa Al-Balad. Este movimiento nunca se retiró del llamado palestino original para el establecimiento de un estado democrático secular en toda Palestina, para todos sus habitantes y como un marco para permitir el regreso de todos los refugiados palestinos. El ataque a Abnaa Al-Balad demuestra que el estado sionista, con todo su poderío militar, siente temor ante la sola idea de una solución democrática en Palestina.
¡Libertad a Raja Eghbarieh!
¡Fuera las manos de Abnaa Al-Balad!
¡Libertad para el pueblo palestino!