La situación no se aguanta más. La crisis política y social es muy grave. Ya no se soporta el hambre, ni la falta de medicamentos ni la represión. Los trabajadores y el pueblo quieren que se vaya Maduro y su régimen cívico-militar. Por eso crecen las protestas y la lucha popular.
El pasado 23 de enero se produjo en Caracas una gigantesca movilización, con una importante participación de trabajadores y habitantes de sectores populares. Esta masiva movilización se reprodujo en las principales ciudades del país, donde por millares, el pueblo venezolano se manifestó contra el gobierno hambreador de Nicolás Maduro.
En los días previos al 23 de enero, y ese mismo día, miles de pobladores de comunidades populares de Caracas y otras ciudades del país, salieron a protestar con barricadas y trancando calles, contra el gobierno.
Los partidos patronales agrupados en la Asamblea Nacional (AN), convocaron a esta movilización para propiciar la intervención militar y de Trump. La AN y su presidente Juan Guaidó, subordinado al imperialismo y con el respaldo total de los gobiernos patronales del Grupo de Lima, pretenden dividir a las Fuerzas Armadas con el objetivo de propiciar un golpe.
La Ley de Amnistía para los civiles y militares, busca proporcionarle garantías, una especie de salvoconducto a los violadores de derechos humanos, represores y corruptos que gobiernan, con tal de que desconozcan a Maduro. Nuestro partido rechaza enérgicamente esta ley de amnistía que solo serviría para perdonar, y se salgan con la suya los militares y boliburgueses que se han enriquecido a costa del hambre del pueblo.
El intento golpista de los partidos de la AN es parte de los planes de intervención descarada del imperialismo norteamericano, así como de gobiernos ultrareaccionarios de la región, como el de Bolsonaro en Brasil, el de Macri en Argentina y Duque en Colombia, que aplican programas de ajuste, y son repudiados por sus respectivos pueblos.
El Partido Socialismo y Libertad considera que las protestas que se han desarrollado en los últimos días reflejan el hartazgo del pueblo trabajador con un gobierno que nos mata de hambre. El pueblo venezolano dijo ¡Basta! Maduro debe irse, pero con la movilización de los trabajadores, los jóvenes y el pueblo. Ni Trump, ni los militares, ni Guaidó y los partidos patronales de la AN, pueden interferir en la decisión del pueblo venezolano de terminar con el gobierno de falso socialismo de Maduro.
Nuestro partido, así como repudia categóricamente la injerencia del gobierno ultraconservador de Donald Trump, también rechaza la intervención de los gobiernos de Rusia, China, Turquía, entre otros, que respaldan políticamente a Maduro, mientras realizan toda clase de jugosos negocios a costa de nuestros recursos,.
Es necesario que las comunidades populares continúen profundizando la protesta en las calles del país. Hay que seguir el ejemplo de los jóvenes de Catia, Cotiza, San Martín, Petare, El Valle, y otras zonas populares del país, que entre el 21 y el 23 de enero salieron a protestar contra el gobierno de Maduro. Cansados de pasar hambre, de no tener medicinas, ni transporte. Hartos de la falta de gas, de agua, de luz, entre otros servicios.
El PSL apuesta porque la movilización crezca y se extienda en todos los barrios, comunidades y urbanizaciones. Que el pueblo movilizado desborde al gobierno y a los partidos patronales de la AN. Que se extienda la rebelión popular. Que sea el pueblo movilizado el que saque a Maduro y derrote la injerencia imperialista.
Luchamos por la libertad plena para todos los presos por protestar y disentir, tanto trabajadores, dirigentes sindicales, dirigentes políticos y de comunidades populares. Estamos por la plena vigencia de las libertades democráticas. Según organismos de derechos humanos ya habría 791 personas detenidas, y miles con medidas cautelares. Producto de la represión a las protestas de los últimos días, ya habrían 27 personas fallecidas. Estamos por la defensa del derecho a huelga, contra la criminalización de la protesta, cese a los despidos en las empresas del Estado, y las amenazas a los que salen a movilizarse.
Planteamos que la salida a esta pavorosa crisis económica y social no puede venir de la mano de los militares, ni de Trump, ni de los partidos de la AN, que son los mismos que traicionaron la rebelión popular del 2017. Estamos porque sean los trabajadores y el pueblo a través de sus organizaciones genuinas quienes gobiernen e impulsen un Plan Económico Popular con aumento de salarios igual a la canasta básica, plan de emergencia de importación de medicinas y alimentos, confiscación de bienes de corruptos e importadores fraudulentos, que el petróleo sea 100% estatal sin empresas mixtas ni transnacionales, por el no pago de la deuda externa, y que todos esos recursos se utilicen para salarios, jubilaciones, vivienda, salud, educación, recuperación de Pdvsa y de las empresas mixtas, y por el impulso de una reforma agraria que otorgue tierras.
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Partido Socialismo y Libertad (PSL) de Venezuela, sección de la UIT-CI
28 de enero 2019