Por Rodolfo Sánchez, Investigador de CNEA-Conicet y referente de Izquierda Socialista Bariloche
25/10/2025. Como parte del ataque a todo avance técnico conquistado por los científicos de nuestro país, Milei ahora ataca directamente lo que ya es un proyecto modelo a nivel mundial sobre el uso de la energía nuclear, o al desmantelamiento del Proyecto Carem y al extractivismo del uranio.
El Carem 25 fue el primer proyecto mundial, iniciado a mediados de los ´80, muy innovador porque es la creación de un reactor nuclear de baja potencia (32 MW), modular (SMR siglas en inglés), 100% argentino y diseñado para usar uranio enriquecido. ¿Para qué sirve? Para dar energía eléctrica al equivalente de una ciudad de 120 mil habitantes. Con los altibajos de la economía y las políticas argentinas comenzó años después su construcción en el complejo nuclear de Lima (Atucha) bajo la mirada atenta de Estados Unidos. Se llegaron a invertir unos 700 millones de dólares, restando 300 más para arrancar el reactor y ponerlo en funcionamiento estable.
Una verdadera sociedad de entrega, es el grupo formado por Milei, Demian Reidel, jefe del Plan Nuclear libertario, y Germán Guido Lavalle, presidente de CNEA. Entre cuatro paredes decidieron parar el proyecto Carem, dicen: “no es económicamente viable”, a pesar de que un documento reciente de la Agencia de Energía Nuclear de la OCDE posiciona al Carem entre los proyectos de mayor desarrollo, compitiendo con China, Rusia (ya operativos) y otros de Estados Unidos, Canadá y Reino Unido. Este gobierno convirtió a Invap Sociedad del Estado (gobierno Río Negro y CNEA) en una Sociedad Anónima y patentaron en Estados Unidos un reactor modular (ARN300) con la empresa Meitner Energy (ignota en el rubro y radicada en el paraíso fiscal de Delaware). Se roban la ciencia argentina y además entregan a capitales privados desconocidos, llevándose a los profesionales de CNEA, principalmente los que estaban en Carem. El vaciamiento del proyecto es tal que, a la parada de la obra, se suma unos 150 profesionales y técnicos especializados, de un total de 400, que ya renunciaron o pidieron licencia. Ann Ganzer del Departamento de Estado entrevistada por La Nación (11/04/22) comentaba: “Queremos asociarnos con la Argentina para proveer estos reactores [modulares] al resto de la región. Tal vez el que está diseñando la Argentina o alguno nuestro o de algún otro país”. Lo que muestra que el gobierno ultraderechista de Milei está cumpliendo las claras orientaciones del Departamento de Estado de Estados Unidos.
Otro punto del Plan Nuclear de Reidel, anunciado con Rafael Grossi, director general del Organismo Internacional de Energía Atómica, es la exportación de uranio. Reidel alentó a empresarios locales y extranjeros: “Argentina se sacó la lotería geológica” y expuso el “modelo Gillette”: vender la maquinita de afeitar y los repuestos, o sea las comercializaciones de los reactores SMR (qué harán con empresas privadas y extranjeras) incluyan un compromiso de compra de uranio argentino. El uranio es un mineral estratégico para hacer los combustibles de los reactores nucleares y la Argentina tiene importantes reservas exploradas por CNEA. Se calcula que hay unas 33 mil toneladas, cantidad que serviría para abastecer nuestras centrales nucleares por más de cien años.

Reidel plantea hacer una YPF Nuclear para la exportación de uranio, no queda claro si la exportación será a granel como hace Australia o transformarlo en dióxido de uranio como hace Kazatomprom, la empresa minera estatal de Kazajistán con el 40% de la producción mundial. A pesar de las imprecisiones del plan Milei-Reidel, queda claro que el proyecto de reactores modulares y la minería de uranio son parte del vaciamiento en CNEA.
De los 17 proyectos mineros de uranio en la Argentina, la CNEA ha llevado adelante actividades principalmente en Sierra Pintada (Mendoza), Don Otto (Salta) y dos en Chubut (Cerro Solo y Laguna Colorada), estos últimos son reclamados por el gobernador Nacho Torres donde hay ocho yacimientos de uranio de los catorce patagónicos. Por su parte el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, promueve a través del RIGI, una ley de promoción con ultra beneficios a los capitalistas, la explotación de Amarillo Grande con Blue Sky Uranium, parte del grupo canadiense Grosso Group y ahora se sumó la Corporación América de Eduardo Eurnekián. El gobierno de Milei, junto con Nacho Torres, Alberto Weretilneck y las autoridades de YPF, NASA y CNEA, promueven el vaciamiento del sector nuclear: privatización de NASA, discontinuidad de la obra del reactor Carem, fomento de fuga de personal especializado a empresas privadas y extractivismo de la minería de uranio, una aberración y por lo cual, las y los trabajadores del sector nuclear se encuentran movilizados para parar este plan de privatizaciones, entrega y vaciamiento.
Sin duda, y como está quedando claro en esta campaña electoral solo el FIT Unidad lucha y tiene en su programa como una prioridad la defensa de la ciencia y de las y los científicos formados en nuestras universidades públicas. El fortalecimiento del Frente de Izquierda votándolo el domingo 26, fortalecerá también la lucha de las y los científicos.

































