Rechazamos el operativo de unidad nacional orquestado por el gobierno de Macri cuyos ejes programáticos son para darles garantías al FMI, a los especuladores financieros y a las grandes patronales de que se seguirá avanzando en la guerra que le declararon a la totalidad del pueblo trabajador. Y llamamos a seguir luchando por la derrota del FMI, Macri y los gobernadores.
No es casualidad que todas las cámaras patronales salieron inmediatamente a celebrar un posible acuerdo de esas características. Lo mismo hizo la cúpula de la Iglesia Católica, luego de haberse reunido con el Papa Bergoglio, bajo el silencio cómplice de la traidora burocracia sindical.
Macri convocó en primer lugar al peronismo que le garantizó todas las leyes en el Congreso y aplicó las recetas de ajuste en las provincias que gobiernan. Los rechazos cosméticos a la convocatoria por parte de Sergio Massa y Roberto Lavagna son parte de la disputa electoral, pero acuerdan en lo esencial: mantener al FMI dominando la economía nacional y seguir pagándole la deuda a los especuladores. Una posición similar ya la adelantó el kirchnerismo a través de sus voceros como Alberto Fernández, mientras que Daniel Scioli salió a apoyar abiertamente esta iniciativa de Macri y el FMI.
El Frente de Izquierda plantea una salida política propia de los trabajadores: poner fin al régimen del FMI y sostiene un plan económico y una reorganización integral del país completamente opuestos al que se puso en discusión, cuya prioridad es la defensa de la vida del pueblo trabajador.
Rechazamos el pacto que se está pergeñando a espaldas y contra el pueblo. Por una Asamblea Constituyente Libre y Soberana que discuta las medidas de emergencia requeridas para satisfacer las necesidades apremiantes de la población trabajadora y promover una transformación del país sobre nuevas bases sociales.
El Frente de Izquierda plantea 10 puntos y los pone a consideración de las organizaciones de trabajadores, estudiantiles, populares, para que sean parte de un plan de lucha para lograr derrotar al FMI, Macri y a los gobernadores, para que esta vez, la crisis la paguen los capitalistas, en el camino de imponer un gobierno de trabajadores. Basta de tregua de la CGT, CTA y de toda la burocracia sindical con el gobierno y las patronales. Paro nacional y un plan de lucha para imponer este programa:
1) Ruptura con el FMI. No al pago de la deuda. Plata para salario, trabajo, salud, educación y vivienda, no para el Fondo Monetario. Nacionalizar la banca y el comercio exterior para evitar la fuga de capitales, cuidar a los pequeños ahorristas y brindar créditos baratos. Por un plan económico obrero y popular debatido y gestionado por los trabajadores.
2) Aumento inmediato de salario y jubilaciones. Que nadie gane menos del valor de la canasta familiar. Ante la escalada de la inflación, indexación mensual de salarios y jubilaciones.
3) Prohibición de despidos y suspensiones. Expropiación y estatización de toda empresa que cierre, puesta a producir, bajo el control de los trabajadores. Basta de trabajo precario y en negro. Todos a planta permanente. Trabajo para todos, reparto de las horas de trabajo sin afectar el salario entre ocupados y desocupados. Abajo la reforma laboral flexibilizadora.
4) Anulación de la reforma previsional. Por el 82% móvil y el aumento del haber mínimo que cubra la canasta de los jubilados. Por la restitución de los aportes patronales rebajados por Macri, por Menem y por Cristina.
5) Eliminación del IVA de la canasta familiar. Abolición del impuesto al salario. Impuestos progresivos a las grandes fortunas. Impuestos extraordinarios a los grandes capitalistas (banqueros, terratenientes y grandes empresarios) para resolver las necesidades más acuciantes del pueblo trabajador. Comités de control de precios y abastecimiento popular.
6) Anulación de los tarifazos. Nacionalización y reestatización de todas las empresas privatizadas bajo control, administración y gestión de trabajadores y control de los usuarios populares. Renacionalización sin pago del 100% de YPF y de todas las empresas petroleras: por una empresa nacional estatal única que funcione bajo el control y la gestión de sus trabajadores. Por un plan nacional energético controlado por los trabajadores que lleve gas natural y luz a todos los hogares.
7) Por una educación nacional única, estatal, pública, gratuita y laica. Fuera las iglesias de la educación. Separación real y efectiva de la Iglesia y el Estado.
8) Por una cobertura de salud gratuita e integral a cargo del Estado. Nacionalización sin pago de los laboratorios que lucran con la salud del pueblo. Por la provisión de medicamentos gratuitos a quienes lo necesitan. Por la expulsión de la burocracia sindical de las obras sociales y su control democrático por parte de comités de trabajadores elegidos en la base.
9) Por un plan nacional de viviendas populares de calidad y urbanización de las villas y asentamientos. Por impuestos progresivos a las viviendas ociosas de los especuladores inmobiliarios.
10) Por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito.
FRENTE DE IZQUIERDA y de los Trabajadores
PTS-PO-IZQUIERDA SOCIALISTA