Escribe Juan Carlos Giordano, diputado nacional electo por Izquierda Socialista/FIT Unidad
El presidente ultraderechista Javier Milei acaba de protagonizar una colosal estafa. Lo hizo desde la máxima investidura presidencial, ligado a gente turbia que frecuentaba la Casa Rosada. A medida que pasan las horas la responsabilidad va quedando más en evidencia. ¿Qué hay que hacer ante semejante escándalo nacional e internacional?
Javier Milei fue parte fundamental de la estafa. En estas páginas explicamos cómo es el mecanismo de semejante maniobra financiera especulativa. Con solo decir que a los tres minutos de lanzada la misma, Milei la promocionó generando una burbuja que luego se esfumó a las pocas horas, lo prueba de manera contundente. Como siempre, ganan los financistas delincuentes, quedando el tendal de apostadores. Milei lo justificó en el papelón que protagonizó con la entrevista guionada en TN con el periodista Jonatan Viale, diciendo que era “lo mismo que un Casino”.
Las coartadas del gobierno se empiezan a caer como castillo de naipes ante la evidencia de entramados ligados a la Casa Rosada. Milei ha hecho lo mismo antes de ser presidente, era su profesión cuando trabajaba para la empresa del tal Mauricio Novelli. Lo mismo hacía cuando era diputado, con empresarios que ahora están presos. El tal Hayden Davis, creador de $Libra, dijo que “pactó con Milei” y era su asesor, algo que fue reconocido por el presidente en la mencionada entrevista. Esto se liga a otras evidencias. También se dio a conocer que quien habría recaudado dinero con esta estafa, habría sido Karina “el Jefe” Milei. También Agustín Laje, quien preside la Fundación Faro que promocionó la cena en Puerto Madero recaudando diez millones de dólares para formar cuadros libertarios y financiar a La Libertad Avanza, aparece en las fotos con estos personajes.
Se dice que Milei no sabía de qué se trataba, que no lo asesoraron, que le hicieron una cama o que la culpa es solo de su entorno. Puras argucias para querer despegarse de semejante enchastre político y de posibles condenas penales o de un juicio político.
La extrema gravedad de todo esto es que Milei lo hizo invocando su investidura presidencial. Desde lo más alto del poder fue el responsable de fomentar esta colosal estafa privada. El verso de Milei de que esta cripto trucha era para financiar a algunas pymes, muestra hasta dónde puede llegar el discurso mentiroso de este ultraderechista. Precisamente cuando la recesión está haciendo estragos y crecen los despidos fruto de su política nefasta.
La CGT junto a las CTA deben llamar a una gran marcha unitaria de repudio
Desde Izquierda Socialista repudiamos inmediatamente esta estafa y a Milei, y señalamos que es una prueba de que gobierna para la especulación y la bicicleta financiera, los grandes grupos económicos, las multinacionales, bancos y el FMI. Un Milei felpudo de Donald Trump, quien acaba de autorizar que sus multinacionales paguen coimas por el mundo para facilitar sus negocios de rapiña.
Alguien se preguntó: si ahora nos enteramos de esto, imaginemos los negociados que estarán haciendo con el RIGI. O la nueva estafa que se prepara con el FMI por parte de Caputo. Un ministro que, sabiendo de qué se trata, cerró filas y dijo que en lo de Milei no hubo delito, dolo, ni corrupción. El mismo que le endosó al pueblo trabajador los 45.000 millones de dólares que pactó con el FMI cuando era ministro de finanzas de Mauricio Macri.
Los encuestadores ya están midiendo el impacto sobre el gobierno y la imagen de Milei. Dicen que los independientes que venían apoyando a Milei pero dudando o perdiendo la paciencia, han acrecentado sus críticas. “Empezó a ponerse en duda la palabra del presidente”, señalan. Hace aguas esto de que es un “experto en economía” o un “líder global” como se presenta.
Este grave hecho no tiene que quedar en la impunidad. El Frente de Izquierda ha pedido en el Congreso una urgente interpelación al gobierno y desde Izquierda Socialista y el Partido Obrero en el FIT Unidad el juicio político. Ya hay denuncias penales en Argentina y en Estados Unidos. El bloque de Unión por la Patria en Diputados también pide el juicio político. Pero el centro no debe pasar por el Congreso (donde la oposición le viene avalando las leyes al gobierno) sino en seguir enfrentando a Milei en las calles y a su brutal motosierra.
El 1F marcó el camino, donde se protagonizó un masivo repudio nacional al facho de Milei con cientos de miles en las calles. Ahora el gobierno sufrió otro cachetazo político. La CGT debe abandonar el pacto con el gobierno y llamar de inmediato junto a las CTA a una marcha de repudio unitaria, convocando a todos los sectores que repudiamos a Milei (ver nota CGT y peronismo en estas páginas), como parte de un plan de lucha que incluya un paro general. En rechazo al Milei estafador y por un inmediato aumento de salarios y de jubilaciones, contra los despidos y demás reclamos del pueblo trabajador. Es la tarea más inmediata y urgente por estas horas.