Reproducimos la nota del el diario «El Salto» dónde detalla la condena a 20 años de prisión de los líderes de las revueltas del Rif y otras tantos personas condenas por este mismo proceso. Desde la Unidad Internacional de trabajadores-Cuarta Internacional denunciamos esta condena y exigimos la libertad de los presos políticos y el fin de la persecución a los que luchan.
Redacción del diario «El Salto»
Cincuenta y tres personas, detenidas a raíz de las protestas que se desarrollan en el Rif desde octubre de 2016, han sido condenadas por un tribunal marroquí a penas que van desde uno hasta 20 años de prisión.
El activista Nasser Zefzafi, la cabeza más visible de las protestas del Rif, en Marruecos, ha sido condenado por un tribunal marroquí a 20 años de prisión acusado de «complot con el objetivo de atentar contra la seguridad del Estado». Otros tres líderes del movimiento Hirak: Nabil Ahmjiq, Ouassim Boustati y Samir Ighid, han sido condenados a las mismas penas en una durísima sentencia que condena a todas y cada una de las 53 personas juzgadas en el proceso.
Las penas han sido de un año de prisión y 450 euros de multa para dos acusados, de dos años para 19 acusados, otras ocho personas han sido condenadas a tres años, diez a cinco años, siete a diez años y tres a quince años, además de los cuatro considerados líderes de la revuelta, condenados a 20 años. Con esta sentencia, «el Estado ha fracasado en el test del respeto de los derechos humanos y las libertades esenciales, así como en independencia de la justicia», ha declarado uno de los abogados de la defensa.
Las movilizaciones en el Rif se iniciaron en octubre de 2016 después de que un vendedor ambulante de pescado, Mohssine Fikri, muriera aplastado por un camión de la basura cuando se introdujo para rescatar el pescado que la Policía había confiscado y arrojado. La indignación se apoderó de una población harta de las humillaciones y la represión del Estado, y que reclamaba desarrollo económico, autonomía para la región, derechos, libertades y el fin de la corrupción.
Durante las movilizaciones, al menos 450 personas han sido detenidas, y varios cientos han resultado heridas en las movilizaciones. La respuesta del Estado marroquí a las peticiones de la población ha sido, una vez más, la represión.