Por Unidad Internacional de Trabajadoras y Trabajadores – Cuarta Internacional
22/2/2025. En vísperas de cumplirse el tercer año de invasión rusa a Ucrania, las tropas rusas tienen la iniciativa y avanzan lentamente. Falto de armamento y con dificultades de reclutamiento que posibilite la rotación en el frente, Ucrania pasa por dificultades. En esta situación y con la llegada de Trump a la Casa Blanca, se han abierto las negociaciones entre EEUU y Rusia sobre Ucrania.
Así como Israel es un interés estratégico del imperialismo norteamericano y esto le da carta blanca al sionismo para cometer las mayores atrocidades, Ucrania siempre ha sido una moneda de cambio entre los imperialismos. El objetivo del imperialismo europeo y Estados Unidos nunca fue la derrota de Rusia, sino llegar a una negociación favorable a los intereses del imperialismo norteamericano, por ello tantas dificultades en la entrega de armamento, antes y ahora. Y Trump cree que ha llegado el momento de forzar esa situación. El contenido de las negociaciones no es la de conseguir la paz justa, sino como proceder a repartirse Ucrania entre los dos imperialismos, entre Rusia y EE.UU. Putin se queda con las tierras ocupadas y EE.UU. se queda con la riqueza en “tierras raras”. Un reparto imperialista como tantos otros en la historia a expensas de los pueblos.
De las negociaciones de las dos potencias para este reparto de Ucrania se excluye al gobierno de Zelensky y, para encubrir su intento de colonizar a Ucrania y al pueblo ucraniano. Trump hace suya la denuncia de Putin de que no hay negociador ucraniano legítimo, y lanza una diatriba contra Zelensky al que culpa de ser responsable de la guerra, de ser un dictador que no quiere elecciones, acusaciones que levantan el entusiasmo del Kremlin.
Desde el 24 de febrero del 2022 el único agresor ha sido el imperialismo ruso con Putin la cabeza, que invadió con sus tanques y tropas a Ucrania. La nación agredida ha sido Ucrania. La causa justa está del lado del pueblo ucraniano que salió a resistir la invasión. Por eso los socialistas revolucionarios estuvimos desde el primer día del lado del pueblo ucraniano sin dar ningún apoyo político al gobierno de Zelensky y diciendo No a la OTAN.
EE.UU. y Rusia excluyen de la mesa a los imperialismos europeos, que ven como retroceden en el concierto imperialista mundial. Su impotencia y división interna es más notoria que nunca con países directamente gobernados por sectores de la extrema derecha o en ascenso alineados con Moscú, como Orban en Hungría, o Le Pen en Francia o AFD en Alemania.
Resulta insultante que Trump critique que en plena guerra Zelensky no haya convocado elecciones, cuando Putin se deshizo de toda oposición, la de izquierda en prisión o en el exilio, y de derecha liberal con Navalni envenenado. Con Trump el imperialismo se saca la careta y a su lado los Elon Musk y demás grandes magnates del capital se frotan las manos para robar las riquezas ucranianas.
La política del gobierno capitalista de Zelensky fue fiar todo a los imperialismos y, como ha pasado tantas veces, nunca el interés de los imperialismos fue la libertad de los pueblos. El gobierno ucraniano sigue queriendo agradar a los imperialismos por eso hasta ha dejado abierto seguir negociando con EE.UU. el porcentaje que podría darles de sus riquezas minerales. Mientras sigue aplicando medidas favorables a la oligarquía y de privatización de servicios públicos y universidades, que hacen pagar los costes de la guerra y desmoralizan a los y las trabajadoras, que son quienes aguantan el frente contra la invasión rusa.
Había y hay otra política reclamada por la izquierda política y sindical ucraniana, mientras luchaba en primera línea del frente contra la invasión rusa. La izquierda ucraniana exigía del gobierno intervenir sobre las grandes fortunas de la oligarquía asociada con las grandes multinacionales para poner esos fondos y la economía al servicio de atender la lucha en el frente y las grandes necesidades de las masas, que son quienes han soportado con muertos y sufrimiento la defensa de Ucrania.
Pero también hay una responsabilidad muy grande de la mayoría de la izquierda reformista mundial que se han puesto del lado del agresor imperialista Putin. Han dejada aislada la lucha de la resistencia de las y los trabajadores y el pueblo ucraniano y la de su izquierda política y sindical Han acusado al pueblo ucraniano de ser instrumento de la OTAN, de ser un pueblo de extrema derecha, y tantas otras falsificaciones. Incluso denuncian de ser “agentes de la OTAN” a la izquierda revolucionaria que apoyamos al pueblo ucraniano.
Ahora resulta grotesco que al coro del castrochavismo, del estalinismo de los PC’s o sectores de la centroizquierda como Podemos, entre otros, que vienen dando su apoyo a Putin como supuesto “antiimperialista”, se les haya unido ni más ni menos que Trump y el actual jefe del imperialismo. El ala más facistizante del imperialismo norteamericano y el jefe de la OTAN. El mismo Trump que lanza un operativo criminal contra los migrantes, que amenaza los derechos de la mujer, del colectivo LGTBI, que quiere convertir Gaza en un resort después de aplicar la limpieza étnica contra el pueblo palestino. Trump, justificando las ansias expansionistas de Putin, busca reafirmar las suyas en Panamá, en Groenlandia o las del sionismo de Israel en su genocidio sobre el pueblo palestino.
Hay que derrotar los planes de Trump y de los imperialismos sobre Ucrania y en Palestina. La Unidad Internacional de las trabajadoras y trabajadores-Cuarta Internacional apoyó el envío de ayuda a la izquierda antiautoritaria y los sindicatos ucranianos, que enfrentan la invasión a la vez los planes del gobierno de Zelensky. Llamamos a seguir desarrollando la solidaridad con la lucha por la libertad del pueblo ucraniano, desde una posición independiente obrera y popular, contra la invasión del imperialismo ruso y contra los planes de Trump y de la OTAN. Llamamos a apoyar también la resistencia de la izquierda rusa que se opone a la invasión y que está siendo duramente reprimida por Putin y su aliado el dictador Lukashenko de Bielorrusia.
Solidaridad con la resistencia del pueblo ucraniano. Fuera tropas rusas de Ucrania.
No al plan imperialista de repartición de Ucrania de Trump y Putin
Solidaridad contra la represión de la izquierda en Rusia y Bielorrusia
Unidad Internacional de las Trabajadoras y Trabajadores-Cuarta Internacional (UIT-CI)
22 de febrero de 2025